Estas Navidades están generando recuerdo bonitos por buenas noticias, buenas acciones, buenos resultados. A veces son detalles tontos, quizá intrascendentes para muchas personas, pero cuando suceden en un momento preciso con ciertas condiciones uno se regocija y piensa "qué afortunado soy".
I Me pasó con un cliente que estuve contactando por casi un año, sin mayores avances significativos. En agosto todo se animó pero seguíamos en papel. Así, como en tantas otras ocasiones, luego de un punto el proyecto bajó de prioridad y mostró posibilidades de no concretarse.
Pasó que llegó diciembre. Pasó que la fecha tope de conclusión para ellos era el 31/12. Para llegarle necesitábamos haber empezado a trabajar, por lo menos, un mes antes; pero pasaban los días sin que se diera el "OK" al proyecto y, menos aún, se podía pensar siqueira en elegir a un proveedor.
Y pasó el milagro de la multiplicación de los panes. De pronto, en menos de 10 días, de tener un presupuesto recortado, cambios de fecha tope (se adelantó al 10/12) y proyectos más urgentes que involucraban al mismo equipo de trabajo, logramos multiplicar el tiempo y los recursos para:
- Concretar la venta de la fase I del proyecto,
- Mejorar la fase II con un nuevo producto y lograr su aprobación el mismo día de presentada la oferta -a pesar de que la competencia tenía un precio inferior y nosotros incluso aumentábamos nuestro monto total en relación con la propuesta original-
- Iniciar el proyecto a los dos días de aprobado (usando temporalmente productos nuestros) y
- Completarlo exitósamente en 3 días, cuando estimábamos semana y media de trabajo.
El cliente se siente muy a gusto. Logró su meta en el tiempo fijado, y nos felicitó delante de mi jefe. Me siento muy feliz porque todos en la oficina nos acoplamos como nunca y el trabajo fluyó como la seda. ¡Genial!
II Otro regalito decembrino es simple: el viernes antes de Navidad fuimos al centro de la ciudad a llevar unos presentes. La zona donde se ubican los clientes es muy transitada, congestionada y los estacionamientos escasos suelen saturarse con velocidad; más aun en estos días.
Hicimos el trayecto de la oficina al lugar en solo 14 minutos (generalmente demora al menos 20 minutos). Elegí el estacionamiento más cercano y me puse en espera de turno. Delante de mí, 4 carros esperaban ser recibidos pero los rechazaron con un gesto y el cartel de "NO hay Puesto". Ni me inmuté. Me acerqué a la entrada como los tres conductores despachados y en lugar de la negación solo me dijeron "déjelo allí" y me dieron mi número. Tiempo de espera: 3 minutos. ¿Cuán genial es esto? Invalorable!!!
III Ya sabía que algunas cosas buenas ocurrirían este diciembre. El regalo enorme de la esperanza y el rayito de luz en el futuro, que nos arropó a todos el 2 de diciembre inundó el ambiente de algo positivo, de una vibra especial.
IV En lo familiar, la visita de mi hermana y su familia luego de 5 años fuera del país es el mejor regalo de todos. Ella, su esposo y lo niños, nos han permitido disfrutar de una Navidad y un próximo Año Nuevo en familia, todos juntos, como en los viejos tiempos. La familia completa es una cosa hermosa. Pudimos conocer a mi sobrina que con sus casi 2 años solo la teníamos en fotos y llamadas telefónicas.
Mi mamá está dichosa, la bulla, la algarabía, el desorden le afectan pero en el fondo los acoge con un placer inusitado porque traduce alegría familiar, travesuras infantiles, buenos momentos. Ella está feliz y eso me hace feliz a mí.
V A veces cosas maravillosas ocurren; bueno, en realidad ocurren todos los días y uno no se percata. Quizá, el que retoñe la platita de pimentones parezca trivial, pero para quién se caracteriza por abortos vegetales, esto es como un voto de confianza de la Madre Naturaleza. Una se llena de esperanza. Sé que en un fututo podré tener más pimentones e incluso, reinsidir con los tomates. Y es así. Esperanza.
Este diciembre me ha traído nuevas y poderosas esperanzas en el hoy, en el mañana, en mi familia, en mi país. No sé que nos traerá el 2008. Sé que los tres primeros meses del año serán MUY severos en la economía; sé que la presión de la bota militar del presidente seguirá buscando formas de estrangular las iniciativas buenas, francas, progresistas y sobre todo NO comunistas, no cesará sino todo lo contrario. Pero tengo fe. Tengo una extraña esperanza reanimada por la corazonada de que pronto terminará, porque nada maligno es eterno, nada negativo es para siempre, todo son ciclos de nacer-vivir-morir y este ciclo está decadente.
Cada inicio de año me inspira y esté llega con esperanzas renovadas, lo mejor está por venir....
Un beso grande a todos!
6 comentarios:
Martis, pasaba a desearte un 2008 pleno de felicidad, salud, amor, prosperidad y muchos éxitos.
Mis mejores deseos para el 2008 para ti y Jesus...
Amen Amiguis...feliz año y lo mejor para ti...un besote
Amen Amiguis...feliz año y lo mejor para ti...un besote
Cari~no, ?estas bien? Ni en facebook se te ve. Espero que todo vaya bien y que pronto vuelvas por aqui.
Te deje un cari~nito en mi blog. Pasate por ahi para que veas.
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