Bebés y más bebés: la felicidad no acaba

... y Franco suena tan feliz por su nueva paternidad que solo puedo desearle las mayores bendiciones del mundo.

Francisco es uno de esos pocos amigos especiales que conservo desde la universidad; y digo "pocos" porque nunca he logrado pegarme mucho tiempo con mucha gente. Yo soy más del tipo bajo perfil en lo posible, que se relaciona con mucha gente e intima con contadas personas. Franco, estuvo allí conmigo de corazón a corazón cuando mi papá murió y mi mundo (cual canción de R.E.M.) as-I-knew-it se murió con él.

Desde ese momento Franco y yo hicimos muy buenos lazos y al pasar del tiempo nos mantuvimos conectados mediante la revista Mureche.net, mediante el chat, el teléfono de cuando en cuando y uno que otro almuerzo flash y esporádico. Nuestros caminos se separaron mucho desde que me inscribí en el postgrado.

El se enserió con el periodismo y yo con la empresa. Él se enredó en tramas, imprentas, amores y desamores. Yo me lié con libros, inmersiones y re-inicios. Nos alejamos por un año y cuando se nos rompió el corazón, nos reencontramos como antes. Nuestras historias distintas se reconectaron por la escritura, y fue gracias a una invitación de él para volver a hacer algo juntos que conocí a Jesús, mi esposo. Ahora Franco cumple años y como siempre lo llamé.

Ya es tradición que lo llame 2 días antes ó 2 días después, JAMÁS en su día exacto de cumpleaños aunque me recuerde en la fecha exacta y esté con cosquillas en los dedos por llamarlo. El tema es que, el 28 de febrero, cuando lo llamo para "darle la sorpresa" me quedé sin palabras: Fernando, su primer nené nació. Me quedé sin palabras. Es una belleza.

Franco habla del nené y solo se le oye talco, cariños y pañales... aunque él sea reservado, y sólo atine a decir que es lo máximo para que sigamos hablando del clima y el precio del dólar. Está hiper contento. Su alegría me dejó una enorme sonrisa en la cara todo el día. Ha sido la mejor sorpresa, porque ni imaginaba que el embarazo de Sonia estuviera tan adelantado. Fernando será muy feliz, sin dudas, su llegada sella una etapa turbulenta de idas y vueltas con un final muy feliz. Ahora solo hay comienzos, y en eso Dios los ayudará siempre. Un gran beso a Fernando y a sus padres orgullosos.

...algo lindo trajo el 12; justo el día cuando mi papá cumplió 8 años.