La verdad me enorgullece tener una primera tanda de tomates. No son los más grandes del mundo, tampoco quizá sean los mejores, pero ¡¡SON MIOS!! del patio de mi casa como quien dice. A pesar de las malas vibras, a pesar de casi creerlos muertos, a pesar de los cotratiempos se impuso la virtud y decisión de estos frutitos de sobrevivir y bueno ahí están.
Las fotos más recientes fueron tomadas hace como 2 semanas. Hoy cuento con 4 de esos mini tomates en mi nevera, esperando a ser sabroceados por nuestros paladares.
.
.
. ..y pensar que solo son unos tomatitos pequeños. ¡Imaginen la alharaca si fueran los mega tomates envidiables! ni yo me lo pdría creer..jejejeje. Besitos!
1 comentario:
¡Bravo! ¡Bravo! le voy a reenviar las fotos a Martín para que le de remordimiento...
Jeje
Martucha, por cierto, sí que te fajaste a escribir en estos días. No puedo dejarte sola un fin y ya tengo full tarea para leer en tu blog.
Me embarcaron -once more- para la playa... los tengo pillados...
Publicar un comentario